Mentoplastia

Mentoplastia

mentoplastia



Se usa para conseguir un resultado proporcionado y un perfil equilibrado del mentón, generalmente mediante el uso de un implante. De esta manera se mejora el aspecto estético y la armonía facial. .



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Es la cirugía que tiene como objetivo modificar la forma, tamaño o posición del mentón.
Este tipo de intervención se practica cuando un paciente presenta un mentón poco desarrollado (hipomentonismo o retrognatismo) ó bien cuando es excesivamente prominente (hipermentonismo o prognatismo).
Las dimensiones del mentón se valoran tanto en el sentido vertical como en el horizontal y en su estudio es preciso tener en cuenta también el resto de la mandíbula, la posición de los dientes, maxilar y frente.
Se utilizan técnicas quirúrgicas diferentes y opuestas. La que se basa en la colocación de implantes es muy sencilla y se realiza de forma ambulatoria. En algunos casos, es necesario realizar intervenciones complejas para lograr el mejor resultado.
En el caso de hipomentonismo o mentón retraído es frecuente encontrarnos con un labio inferior caído por la falta de desarrollo óseo.
En estos casos, recurrimos a la implantación de una prótesis de silicona sólida o de Gore-Tex, cuyo tamaño y forma se adaptarán a las necesidades de cada paciente.
La colocación se realiza a través de una pequeña incisión en la mucosa, o en la piel bajo la barbilla, con anestesia local y en régimen ambulatorio. Esta técnica puede ocasionar alteraciones transitorias de la sensibilidad y movilidad del labio.
El aumento del mentón es un procedimiento que en los últimos años se ha hecho muy popular por sus ventajas y excelentes resultados.
El mentón y las mejillas conforman el marco facial y cualquier cambio en estas estructuras producen espectaculares resultados.
Es una cirugía que se puede realizar con anestesia local y sedación según el caso, demora aproximadamente treinta minutos, y requiere incapacidad mínima.
No se recomienda la utilización de materiales de relleno no absorbibles, dado su comportamiento incierto y las grandes posibilidades de complicaciones.
Es importante saber que la mentoplastia es una intervención que casi no duele.
Para el proceso de recuperación se usan vendajes externos que ayudan a la desinflamación, que son retirados al día siguiente en el consultorio.
La inflamación dura aproximadamente 10 días. Se recomienda que en la primera noche, duerma con la cabeza apoyada en tres almohadas.
Para una recuperación total se recomienda incapacidad laboral de dos días y social de dos semanas.
Después de la operación, la piel queda resentida, es conveniente evitar el sol durante el primer mes, y usar bloqueador solar.